Últimamente, están viniendo a consulta, pacientes con problema de condromalacia rotuliana, así que se me ha ocurrido que sería buena idea hacer un post sobre ello: qué es y de qué manera lo tratamos en Fisiolou. ¿Qué os parece?
Condromalacia rotuliana, ¿Qué es?
La condromalacia rotuliana es una lesión degenerativa de la superficie cartilaginosa de la rótula, que puede ocasionar dolor en la zona anterior de la rodilla y dificultar el movimiento de la misma.
Es una afección bastante común, especialmente en jóvenes y deportistas, y puede tener diversas causas.
¿Qué es lo que ocurre? La rótula es un hueso triangular situado en la parte frontal de la rodilla, que se desliza sobre la superficie del fémur al flexionar y extender la pierna.
El cartílago que recubre la superficie de la rótula ayuda a reducir la fricción y amortiguar el impacto durante los movimientos de la rodilla.
Cuando este cartílago se desgasta o se daña, se produce la condromalacia rotuliana.
Condromalacia rotuliana. Causas
Entre las causas más frecuentes de la condromalacia rotuliana se encuentran:
👉 El sobreesfuerzo repetitivo de la rodilla.
👉 La mala alineación de la rótula.
👉 El desgaste natural del cartílago con la edad, y lesiones traumáticas.
👉 También pueden influir factores como el sobrepeso, la falta de actividad física, y la falta de flexibilidad en los músculos de la pierna.
Condromalacia rotuliana. Síntomas
Los síntomas más comunes de la condromalacia rotuliana son:
👉 Dolor en la zona anterior de la rodilla, que puede empeorar al subir o bajar escaleras, estar sentado con las rodillas dobladas, o al realizar actividades deportivas que impliquen un esfuerzo en la rodilla.
👉 También puede haber sensación de rigidez o chasquidos en la articulación.
👉 En algunos casos inflamación.
Condromalacia rotuliana. Fisioterapia
El tratamiento de la condromalacia rotuliana dependerá de la gravedad de la lesión y de las causas que la hayan provocado. En general, se recomienda un abordaje multidisciplinar que incluya reposo, fisioterapia, medicamentos antiinflamatorios, y en algunos casos, cirugía.
El reposo es fundamental para reducir el dolor y permitir la recuperación del cartílago dañado.
Se recomienda evitar actividades que impliquen un esfuerzo en la rodilla y, en caso de que se deba permanecer sentado durante mucho tiempo, utilizar una almohadilla o cojín para elevar las rodillas.
La fisioterapia es un elemento clave en el tratamiento de la condromalacia rotuliana, ya que puede ayudar a fortalecer los músculos de la pierna y mejorar la alineación de la rótula.
Los ejercicios de fortalecimiento suelen incluir ejercicios de cuádriceps, isquiotibiales, glúteos y gemelos, así como estiramientos y masajes.
El abordaje con fisioterapia invasiva también es efectivo contra el dolor continuo en la zona interna o externa de la rótula.
Se puede incluir tratamiento con vendajes para reorientar la rótula y reducir el rozamiento con el cartílago del fémur y tibia.
En algunos casos, el médico puede prescribir medicamentos antiinflamatorios para reducir la inflamación y el dolor en la rodilla. También se pueden aplicar infiltraciones de corticoides en la articulación para aliviar el dolor.
El pilates también está indicado en esta lesión para fortalecer y estabilizar los miembros inferiores con el tronco. Al fortalecer los aductores y el Core mejoraría la movilidad de la rótula y disminuiría la presión de la articulación.
En casos más graves de condromalacia rotuliana, en los que el cartílago está muy desgastado o se han producido lesiones importantes en la rótula, puede ser necesario recurrir a la cirugía. En este caso, el tipo de intervención dependerá de la causa y la gravedad de la lesión.
Una opción de cirugía es la artroscopia, que consiste en la introducción de un pequeño instrumento a través de una incisión en la rodilla para reparar o extraer el cartílago dañado. Otra opción es la cirugía de realineación de la rótula, que busca corregir una mala alineación de la rótula para reducir la fricción y el desgaste del cartílago.
La fisioterapia después de estas intervenciones también es muy importante para mejorar la movilidad y el control de la rótula, fortaleciendo los músculos de la pierna. En cualquier caso, el tratamiento de la condromalacia rotuliana debe ser personalizado y adaptado a cada caso.
Debes consultar a un especialista para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado a las necesidades de cada paciente.
En cuanto a la prevención, algunos consejos que pueden ayudar a reducir el riesgo de sufrir condromalacia rotuliana incluyen:
👉 Mantener un peso saludable
👉 Realizar ejercicios de fortalecimiento muscular, como los mencionados anteriormente
👉 Utilizar calzado adecuado para las actividades físicas que se realicen.
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